Éste es un taller para entrar en contacto con las emociones desde una dimensión vivencial. A través de juegos, dinámicas y personajes que nos permitan experimentar todos los colores del espectro emocional desde una perspectiva distinta a la que lo hacemos habitualmente.
La improvisación es un juego que nos proporciona herramientas tanto para actuar sobre un escenario como para la vida cotidiana. Nos prepara para cometer errores y aprender a aprovecharlos. Nos libera de la necesidad de control haciéndonos más flexibles y libres.
Desde esta óptica, trabajaremos con escenas creadas de forma instantánea, sin guión ni preparación. Construiremos de forma colectiva reforzando las ideas de vínculo y poniendo énfasis en la importancia del trabajo colectivo y de la gestión emocional siempre a través del juego.